Ayer el Consejo de Seguridad Nuclear hizo la propuesta sobre las sanciones por la fuga radiactiva de noviembre pasado. Ahora es el ministro de Industria quien debe fijar la cuantía entre los valores mínimo y máximo de la propuesta, entre 9 y 22 millones de euros.
Me gustaría tener disponibles los datos de la rentabilidad diaria de la nuclear de Ascó, para saber que puede representar realmente esta sanción, ya que al oir a Greenpeace como protestaba por considerarla baja, hablaban de que son muy pocos días de funcionamiento el coste de la multa, aunque parezca una cifra muy alta de entrada, y sin duda la mayor impuesta nunca en nuestro pais a una nuclear.
Creo que la sanción debería ser realmente ejemplar, y no minimizarla por los bajos riesgos a la población y a los trabajadores que hubo, ya que la cadena de negligencias del caso es realmente considerable. Creo que la sanción económica debe ser una parte, pero por otra está las responsabilidades personales, de quienes no comunicaron el incidente en su momento, quienes desconectaron los controles...
Siempre en casos de este tipo, me quedo con la sensación que pagando un 'impuesto extra', la impunidad sigue, es como quien recibe multas por contaminar, pero le sale a cuenta hacerlo.
Ahora que hay una corriente notoria que quiere impulsar de nuevo la energía nuclear para contribuir en menor medida al calentamiento global (me gustaría saber como se consideran las emisiones de calor de estas centrales) más que nunca se debería exigir el máximo rigor en el control de las existentes, y con lo que veo, casi considero obligado mantener ese, no por viejo menos actual, lema de 'Nuclear? No Gracias'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario