La designación por parte de Aznar de su sucesor (adelantada 48 horas misteriosamente, coincidiendo con un importante acto de dirigentes del PSOE, es simplemente eso, pura casualidad, seguro) es una muy buena muestra de democracia interna en un partido político y de pluralidad, vamos, que no hay nada más democrático que un jefe, designe a su sucesor, y luego la dirección refrende esa designación.
Es el método más democrático para abrir una sucesión en un liderazgo, donde todos pueden hablar claramente: o apoyan o estan en contra, no hay alternativas ni propuestas de acción, adhesión inquebrantable, y fe ciega, confianza en los designios divinos del líder que deja la primera fila del gobierno y partido.
Yo es que no veo problema alguno, me recuerda a todos los modelos de democracia, por ejemplo, Franco designó a quien le iba a suceder, el rey. Porque claro, esta es la democracia que les ha inspirado y les seguirá inspirando parece que por mucho tiempo.
Hagamos apuestas, será la votación en la ejecutiva de esas del 99,99 % de los votos refrendando? O puede que incluso se superen y lleguen a más del 100% de los votos, no? Vamos, nada que envidiar de los referendums de Fidel Castro, ni de Franco, ni de muchos regímenes caracterizados por la pluralidad y la democracia participativa, donde nadie se opone a nada que venga del poder...
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