Faltando menos de dos semanas ya para la elección del nuevo presidente de los EEUU, vemos como antiguos compañeros de Bush, incluso alguno amigo del candidato republicano, dan la espalda a estos, y apuestan por Obama. Powell (mal que le pese, siempre llevará encima el cartelito de mal actor intentando engañar al consejo de seguridad de la ONU con las 'pruebas' sobre Irak) abrió la caja con su apoyo a Obama, y ahora ha sido un antiguo portavoz de Bush, uno de los que obviamente difundía su mensaje.
No deja de ser algo pintoresco que gente de primera fila del bando republicano, ahora sin que lleguen a renegar de su pasado, llamen a votar por el cambio. Podría uno hasta llegar a pensar que han admitido sus errores, pero en alguien de primera fila, no me convence, por más que sea posible.
Pero seguro que detrás de ellos, que almenos han tenido el valor de abrir ese camino, vendrán muchos chaqueteros, que cambiarán sin problemas sus discursos, si como todo indica, acaba ganando la carrera presidencial Obama. Yo espero que gane, si, pero fundamentalmente porque veo peor a su rival.
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