Siempre he oido eso que dicen que es de bien nacido ser agradecido, y hoy me apetece dar las gracias a unas cuantas personas. Hoy lo he vuelto a ver muy claro, y así paso a dar las gracias a quienes corresponde.
Primero, inevitablemente, a gente como el trío de las Azores, esos Bush, Blair y Aznar, que tanto prometían una intervención para en su lucha contra el terrorismo internacional, conseguir un mundo más seguro, y hoy en día, vemos como toca aumentar aún más las medidas de seguridad en los vuelos, hasta el extremo que si uno por ejemplo, lleva lentes de contacto, no puede llevar a mano el líquido, el envase para conservarlas, tiene que facturarse eso, con el inevitable riesgo de pérdida o retraso, tan cómodo que es.
Segundo, a tantos que siguen contribuyendo en la línea de ese gran trío, con acciones como la de Israel, que sólo ayudan a radicalizar más a quienes de por si, ya lo están mucho.
Y tercero, a los que amenazan y buscan acabar con mucha gente que probablemente se hayan manifestado en contra de esas políticas.
Gracias a todos ellos, cada día parece que avanzemos más en al línea de convertir este mundo en el orwellano 1984. Yo me niego a avanzar en ese camino.
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