de un prisionero iraquí con su hijo en un campo de detención/concentracíón. Hoy la World Press Photo ha premiado al fotógrafo que la hizo, Jean-Marc Bouju precisamente por esta foto. Para mi revelaba ya en ese momento uno de los horrores de esa guerra. Mi comentario era lo mismo que podría decir ahora: "Ilustro la operación 'libertad para Irak' con la foto que encabeza esto, un preso encapuchado con su hijo... si esto es libertad...". Lo que ha venido después, sigue mostrando lo mismo.
Este domingo, se cumplirá un año de esas gigantescas manifestaciones en todo el mundo de protesta contra la guerra, que se convirtieron en la probablemente mayor muestra de rechazo de la historia a una guerra que veíamos venir y no queríamos. Releyendo lo que escribí ese 15 de febrero, recuerdo muy bien ese día y lo bueno que tuvieron esas protestas. Este domingo se recordarán, aunque sin duda no tendrán tanta repercusión, no conviene olvidar y más viendo como un año después, la situación de Irak nadie se atreve a calificarla de mejor.
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