En 1.931 una monarquía completamente desacreditada por su connivencia con un dictador, en un día como hoy, dejaba de ser como tal, y se proclamaba la segunda república. Unos años que dieron al pais un nuevo dinamismo, que a pesar de los muchos problemas, dió notables frutos en los pocos años que tuvo.
Años después, estamos en una monarquía, herencia directa de los deseos de otro dictador inspirado en gran medida por las ideas del hijo de ese anterior dictador. Porque por más que la constitución fuera ratificada por el conjunto de la sociedad, y 'legalizando' así la monarquía, no debemos olvidar que el rey lo fué por deseo del dictador.
La monarquía no es más que uno de los restos del feudalismo, una institución completamente anacrónica y sin sentido.
Hoy, igual que en 1.931, Viva la república!
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