Hoy cumple 80 años, y unos cuantos como siempre, no podemos olvidar este día, y como otros tantos días del año, recordar su nacimiento con honor.
Lástima que fuera tan efímero su paso, pero su trascendencia está muy por encima de lo que duró, ya que su recuerdo, el camino que marcó, es algo que dejó una huella imborrable en nuestra historia.
Violentada por los reaccionarios y quienes nunca han defendido ni defenderán la libertad, se hace imprescindible recordarla, recordar sus enseñanzas en lo bueno y no olvidar los errores, un buen punto de partida, una buena referencia para muchos caminos.
Espero vivir y participar del momento que salga su sucesora. Felicidades Segunda República!
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