Aznar lo ha conseguido tal como era previsible. Las nuevas amenazas de Bin Laden ya nos incluyen como posibles objetivos claros. Aznar sigue con su particular 'empeño' contra el terrorismo (contra un tipo de terrorismo, quede claro) de la manita de su amo Bush. Mucho pasearse por aquí y por allá, anunciando prebendas, pero adoleciendo de un eterno problema: si el terrorismo islamista tiene fuerza y cada vez más, es precisamente por actuaciones tan unilaterales como las que lleva a cabo EEUU tanto en Irak como vía el estado israelí, contra los palestinos. Siguen empeñados en un símil que creo muy adecuado, en tapar los pinchazos de un neumático, en lugar de si es preciso, poner un neumático nuevo. Actúan cuando un problema les 'estalla', pero nunca intentan evitar sus causas ni ponerle remedio antes.
Otro botón de muestra, la revuelta social de Boliva del último mes, que ha llevado a la huida de su presidente a los EEUU. Menuda casualidad que todo haya venido por el plan de exportar gas a los EEUU, y que el propio pueblo de Bolivia se ha negado a aceptar. Lo necesitan en su tierra y el presidente de su pais, pretende exportarlo. Seguro que esta vez los benefactores americanos no tenían nada que ver con el plan, que nació de motu propio por el desinteresado presidente dimitido y huido.
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