Voy a presionar un poco a Cornie tras el comentario que ha hecho Shak en su blog, diciendo que es el momento de explicar la historia de la sardina... Aunque yo la conozco, lo mismo que alguna gente, y tuve el placer de comentarla con las dos protagonistas este verano, quiero que la cuente!
Pero no voy a ser menos, y contaré una anécdota mía que en su momento conté cuando ella contó la suya, es la mejor forma de presionar.
Rondaría por allá el año 80 o tal vez el 81, era verano, y mis padres se fueron de vacaciones con mis hermanos, yo dije que iría más adelante, necesitaba estudiar y todo lo demás que hace un universitario de vacaciones. Por aquella época, yo llevaba una larga melena como ahora, o un poco menos, pero con más pelo, claro, y como afeitarme siempre me ha dado mucha pereza, pues era habitual pasarme varios días sin afeitarme. Una mañana, recuerdo que bajé a la panadería a comprarme el pan, y yo tan tranquilo, con la bolsa, me pongo a hacer la cola en la panadería. No recuerdo que ropa llevaría, pero tampoco es que fuera muy habitual en esa época ver a un joven melenudo y mal afeitado, y con ropa seguramente tejanos y camiseta, comprando... En esas, que va una mujer algo mayor, y me dice en voz baja: 'Noi, que vols que et compri de pa?' (chico, que quieres que te compre de pan) Se me quedaron grabadas sus palabras. Reconozco que me costó reaccionar, nunca imaginé un comentario así, que me trataran como a un mendigo... Tras unas décimas de segundo, con toda naturalidad y sin más, le respondí que mi pan me lo compraba yo, que quien era ella para decirme nada... Entiendo que lo hizo con la mejor intención del mundo, pero me sentí molesto. Cuando la panadera, que me conocía, me preguntó por lo que me habían dicho, se lo conté, y se puso a reir a carcajada limpia, y yo también, fué buenísimo, aunque por suerte para la mujer, esto pasó cuando ella ya se había ido.
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