Por fin puedo decirlo, estoy ya a las puertas de una nueva etapa en mi vida. Es algo que ya hace cerca de tres años empezó a rondarme en mi cabeza, y que dos años atrás ya se hizo más que evidente, necesitaba un cambio radical en mi vida, estaba por completo estancado, y por más que conseguí rodearme de buena gente, de buenos amigos, no era feliz.
Una persona a la que aprecio mucho, comentando estos temas, me dijo una frase de una película que le había impactado, y que decía algo así: 'demasiadas cosas hay mediocres en la vida, como para permitir que el amor sea una de ellas'. Y así lo veo. En mi caso, lo que empezó hace unos 15 años agonizaba, por más que tenga una hija que me ha estado alegrando la vida desde que llegó, mi felicidad se limitaba a eso, y creo que es injusto. Lo es para ella, lo es para quien era mi pareja, y lo es para mi. Si, por una hija uno se sacrifica lo que haga falta, pero una convivencia sólo por ella la va a hacer más feliz y vivir mejor? No, creo que no.
Han sido dos años debatiéndome en si seguir con una rutina insípida diaria por la niña o aspirar a una vida mejor. Sólo ella en todo este tiempo me ha retenido, hasta que ya decidí que no podía más. Aún así, me costaba demasiado dejarla, renunciar al placer te tenerla cada día, se me hacía muy difícil y sólo esto me paralizaba. Finalmente, hace unos meses, me decidí por completo, y llegué con la madre de mi hija a un satisfactorio para todos acuerdo de separación, que acabé concretando en todos sus términos la semana pasada, y di el último acelerón en la búsqueda de un pisito para poder marcharme ya.
La suerte que no tuve los meses que llevaba buscando, la tuve de golpe, y a primeros del próximo mes me mudaré ya, a un sitio pequeño, pero acogedor, a rehacer mi vida, y poder volver a ser feliz. Será duro empezar de nuevo. Pero en este viaje no me voy a sentir tan solo como cuando me fuí de casa de mis padres, esta vez cuento con muy buenas amistades, a quienes poder dedicar mucho más tiempo que el que he dedicado hasta ahora.
No puedo acabar, sin agradecer a quien más me ha ayudado y animado estos meses a este paso, a esta nueva etapa, una etapa que queremos compartir, y donde nos hemos ayudado uno al otro en todo momento, S, tu me has ayudado a dar este paso, a que lo dé por mi, igual que te he ayudado yo a tener al alcance de tus manos algo que necesitabas tener, y por fin has vuelto a tener esas ilusiones que todos necesitamos. Sólo puedo decirte que sabes que tienes un sitio de protagonista en esta etapa, y que estaré esperando el momento. Aunque no fuera juntos, valen la pena los cambios que tenemos por delante nuestro.
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