El viernes me confirmó mi padre lo que ya me había anticipado el jueves, había hablado con mi hermano para irnos a buscar setas este sábado. Yo ni lo dudé, el año pasado no habíamos ido y me apetecía estar por la montaña unas horas de nuevo haciendo algo de lo que más me ha gustado siempre.
Lo mejor fué que el viernes me dice la niña cuando la fuí a buscar al cole que quiere venir también... Yo encantado de la vida, por supuesto, pero pensaba que como hiciera frío o no encontráramos nada, se iba a poner muy pesada y podría ser una lata. Aún así, lo pensé y me dije, lo peor que puede ser, no encontrar setas? Bueno, y que, pues a pasear por la montaña, enseñarle cosas allí y ya está, así que sin problemas!
Despertarla a las 7 y poco de la mañana no fué fácil, por más que estaba avisada, se puso tonta que no quería ir, suerte que era un simple mal despertar! Viaje tranquilito, y ya en la montaña la niña contentísima lo mismo que mi padre y hermano, y como empezamos a encontrar setas enseguida, todo fué rodado, ella poco a poco empezó a verlas y distinguirlas y se lo iba pasando bomba, y por supuesto, yo viéndola. Le dió por estar a ratos con cada uno, 'ayudando' a que viéramos más, hasta el punto en que inentaba en sus posibilidades, que todos tuviéramos los cestos igual de llenos.
Mi hermano trajo su cámara de fotos, y le sacó varios momentos, para partirse de risa, ya que a ella no le gusta que le hagan fotos, pero verse en video y oirse la fascinó por completo. Ya con las cestas llenas, y cansados comimos un poco antes de volver para casa. La niña ni que decir, que nada más entrar en el coche se durmió, y una vez en casa, a la limpieza... Sólo me faltaba eso, tras la agotadora mañana ponte a limpiar las setas y una vez limpias, a dejarlas preparadas, medio cocinadas, para comer durante unos cuantos días. Eso si, el sábado por la noche me preparé una cena especial: plato único de 'fredolics'.
PS: he puesto una foto del tipo de setas.
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