Ayer y hoy es un tema de conversación en muchos medios, y también se ha escrito y se seguirá escribiendo mucho sobre los límites de la libertad de expresión a raiz de un informe del Consell Audiovisual de Catalunya y las licencias de emisión y condiciones que tiene la cadena COPE.
En contra de lo que muchos afirman, no se ha censurado nada, pero si hay algo preocupante para muchos, y con razón: no deben ser órganos políticos los que midan los límites de una de las más importantes libertades, las tentaciones a limitar los excesos políticamente me parecen un error brutal y que no se deben permitir. Si hay mentiras, difamaciones o lo que sea, es mejor no darles más cuartelillo, y o bien se actúa judicialmente, o no se les hace caso, y punto, más vale poder decir 10 palabras de más que una de menos.
Y digo yo, si estos criterios de rigor se hablan políticamente, porque no se aplican a otros ámbitos como la prensa y programas 'rosa'? No hay menos rigor aún ahí?
La verdad, preferiría seguir ignorando esa cadena, pero ahora es inevitable hacerles referencia, el exceso de ahora provocando un incidente diplomático, es algo que la verdad hace un flaco favor al pais en su conjunto, pero espero que ese ánimo de engaño que tuvieron con el nuevo electo presidente boliviano, al margen de que se pueda o no actuar judicialmente en su contra, ojalá se les vuelva en su contra. Y sólo faltaría que acabaran como defensores de la libertad de expresión quienes más la desprecian.
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