En algunos momentos me sucede que aún teniendo motivos para estar contento y animado, me vienen recuerdos de épocas pasadas, algunos muy alegres, otros tristes, y me quedo como en un estado casi vegetativo, donde mis ideas se revuelven una y otra vez buscando sinsentidos a cualquier cosa.
Me pregunto como a partir de un recuerdo agradable, un recuerdo de un precioso amanecer primaveral de hace un poco más de 20 años, pude ponerme a buscar cartas que me enviaba con una amiga en esas fechas. Si, aunque parezca mentira esa época fué la única en la que escribía a mano muy a gusto. Cual es el cambio? A diferencia de lo que hago ahora, no conservo lo que yo escribía. Ahora me gusta guardar lo que envío, lo que escribo, porque a veces me apetece consultar cualquier cosa por un recuerdo.
Serán las fechas, y un recuerdo que viene implacable todos los días, pero especialmente ahora, lo que me esté sumiendo en una especie de letargo inútil, muy bellos y tristes recuerdos se entremezclan en un mar de sensaciones que soy incapaz de controlar.
Supongo que el mero hecho de escribir esto, me hará sentir mucho mejor dentro de poco, y poder salir de estas encontradas sensaciones, que cuando más motivos tengo para estar feliz, me siento algo triste. Y esto no debe ser así. De momento, la música, The Animals sonando de fondo, está poniendo su granito de arena.
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