Ayer se cumplieron los 100 días del gobierno tripartito de la Generalitat. Lo cierto es que pocos gobiernos han sufrido en tan poco tiempo un acoso y derribo como el que ha tenido, y a pesar de esto, y de los problemas propios de diferentes sensibilidades y preferencias en algunos temas, lo cierto es que parece un gobierno con la suficiente solidez como para que pueda pensarse ya que no es descabellado que se pueda agotar la legislatura.
El ataque al que ha sido sometido, empezó incluso antes de constituirse como tal, y la razón que yo veo, es precisamente que era un espejo o puerta abierta a lo que podía suceder en el resto del pais. Siempre pensé que los socialistas difícilmente podrían tener un gobierno sólido en el conjunto del pais sin que lo tuvieran en Catlunya, y en este caso, las esperanzas de un cambio en el nefasto estilo de política de enfrentamiento del PP con el resto, parece que se han transmitido a todo el pais, y además del cambio en Catalunya, se ha abierto paso al cambio en el gobierno del estado.
Han cambiado algunas cosas, pero otras no tanto, por poner un ejemplo que anoche ya comentaba el propio Buenafuente en su programa, aún cambiando el director de los medios de comunicación públicos de Catalunya, no se perciben por ahora cambios relevantes en la propia televisión ni radio, y es algo que va en la línea de no hacer de ellos unos instrumentos de partido.
Hace 100 días se abrió un periodo de cambio y esperanza, que espero se pueda seguir desarrollando y en un clima mucho más favorable al anterior al 14-M.
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