Los contínuos comentarios casi a diario sobre la historia de la susodicha mochila y las hipótesis que si no veladamente, si cuanto menos se dejan intuir, como si alguien la hubiese colocado expresamente para entorpecer la investigación del 11-M y de ese modo, cuestionar todo el sumario y la propia investigación, para poder así especular con una versión e los hechos favorable, chocan con una demoledora realidad: fué gracias a su desactivación, que se pudo empezar la cadena de detenciones que culminó días después con la explosión-suicidio de Leganés.
Sólo una intencionada distorsión de la realidad permite mantener unas dudas sober la investigación, y el PP sigue entrando en ese juego, incapaz de asumir su derrota electoral, y buscando siempre causas ajenas a ellos mismos.
Ese cuestionarlo todo, lleva a viñetas tan graciosas como esta:
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