domingo, septiembre 19, 2004

Las 5 del viernes, en domingo

1) ¿Tienes vecinos? ¿Les conoces?

Si, tengo vecinos, y conocerles, pues sólo de vista reconocería a uno. Claro que llevando sólo 2 escasos meses en el piso, poco puedo conocer.

2) Cuando llegaste de nuevo a tu casa, ¿te presentaste a los vecinos? ¿Les invitaste a tu casa? ¿Lo hicieron ellos?

No, para nada, ni me he presentado ni nadie ha venido. Ni en el piso actual, ni en los otros 2 en los que he vivido al margen de casa de mis padres, claro.

3) ¿Cuáles crees que son las normas de convivencia que todo buen vecino debería respetar? ¿Las respetas tú?

La norma básica: no hacer ruidos innecesarios a horas intempestivas cuando se puede evitar. Y claro, yo soy de los que no hacen lo que no me gusta que me hagan a mi.

4) ¿Tienes o has tenido algún vecino que te hiciera entrar ganas de cambiarte de vivienda? ¿Por qué?

Nunca he llegado a esos extremos. No me he encontrado con ningún vecino tan insoportable como para plantearme algo así. Sólo en un momento, a unos vecinos del piso de arriba en el piso donde estuve tras irme de casa de mis padres, les puteé un poco expresamente con los humos, una venganza muy al vuelo por dejar la ropa tendida de un modo que me tapaba completamente la vista. Las cortinas o sábanas una vez les quedarían impregnadas de un olor a pescado...

5) ¿Alguna anécdota divertida sobre la convivencia entre vecinos?

Tanto como divertida... En casa de mis padres, mi madre y la mujer del piso de abajo no se hablaban entre si por una pelea que tuvimos su hijo mayor y yo (misma edad, misma escuela, una pelea tonta que nadie recuerda que pasó) dejaron de hablarse, y lo bueno, es que nosotros como si nada.

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