Muchas cumbres de altos vuelos, donde lo que reina para mi son palabras casi vacías. Es bueno que se sienten en una misma mesa paises muy enfrentados, pero no basta. Y a veces hace mucho más por mostrar un camino por la convivencia algo tan simple como un partido de fútbol.
Tres años más o menos gestando una idea, un combinado futbolísitico compuesto por jugadores israelís y palestinos, se enfrentarán esta noche al Barça. Sean Connery será el 'maestro de ceremonias', y hará el saque de honor. Son muchos los actos que se hacen para impulsar la convivencia pacífica entre unos y otros, desde niños hasta adultos, y este gesto de hoy puede ser uno de los más significativos. Aunque sólo sean unos pocos quienes hagan un equipo conjunto, seguro que puede ayudar a muchos más a ver a sus vecinos como vecinos y no como rivales.
Gracias a mi musa por inspirarme anoche a escribir esto. Aunque siga KO y algo mejor, hay momentos en los que da gusto sentarse para escribir algo así.
Más información en El Pais.
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