Estoy convencido que muchos lectores nunca habrán leido una noticia de este tipo. Y la verdad es que no me extraña, el secuestro judicial de un libro o revista es algo que en nuestra democracia se ha dado tan pocas veces, que no recuerdo ninguna, pero alguna habrá, seguro. Era algo muy habitual del franquismo, cuando una publicación o un libro podía 'amenazar' al régimen o a alguien afín, el aparato judicial se ponía en marcha para impedir su difusión.
Recuerdo un caso del fin del franquismo, creo que ya sin Franco, pero con el Fraganosarurio en el ministerio del interior, en que se secuestró una edición del semanario Cambio 16, que acabó con un editorial muy distinto, incitando a que si se quería sabe la verdad, se leyera el Newsweek, que diciendo lo mismo, pero en inglés, se podía adquirir sin problemas en los quioscos.
La teoría es que se debe proteger el honor y evitar la calumnia. Un tanto chocante cuando algunos gobiernos no vacilan a la hora de difundir mentiras. Pero este tipo de medidas no afectan por igual a todos. El demandante, quien quiere impedir la publicación, debe depositar una fianza por las responsabilidades que puedan derivarse en el caso que finalmente pueda ser publicado y los prejuicios que le pueda suponer al autor. Si alguien me quisiera difamar a mi, a ver como podría yo impedirlo, con que dinero?
Un secuestro judicial está ahora en marcha, se ha paralizado la venta de un libro que pretende desvelar las 'realidades' del concurso-reality OT, donde con la colaboración de informaciones aportadas por un concursante de la primera edición, se desvelan supuestas prácticas abusibas, contratos donde nada importan las personas, manipulaciones de las votaciones telefónicas y por sms...
La verdad es que el tema en si me importa un comino, el contenido del libro, por más que tenga claro que en esencia el reality no deja de ser lo que insinúa, un puro negocio, no me va a aportar nada, no me interesa, porque no hacen falta datos para tener claro lo que es.
Lo grave para mi es que una productora poderosa, pueda paralizar que se difunda algo que les puede perjudicar, ellos sin problemas pueden depositar la fianza de 500.000 euros para que el libro siga sin publicarse por el momento. Donde está la libertad de expresión? Temen que se difundan secretos que no les interesa que se conozcan? Gestmusic es una productora donde participan como importantes cabecillas los que antes eran componentes de un grupo musical que en su momento fué muy apreciado en Catalunya, La Trinca, y que batallaron también lo suyo en contra de la censura desde su música y sus letras en ocasiones muy satíricas.
Como en este caso el propio fiscal pide que se anule el secuestro, seguramente el libro vea la luz en pocos días, y la productora habrá conseguido el efecto contrario al deseado: es posible que ahora más gente se interese en ese libro, y que lo que allí se difunde les haga algo más daño.
Quien les ha visto y quien les ve.
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