7 años atrás (y II)

Me desperté con un sueño menos tranqulizador todavía y completamente sudado. Todo era muy extraño, y no encajaba nada, nada era algo que pensara normal. No es que recuerde muchos detalles, todo era tan confuso, que sólo recordaba la sensación de que ese día iba a ver a mucha gente que no 'tocaba' ver, y en situaciones muy extrañas, que nunca he podido recordar con detalle. Eso me intranquilizó más, notaba el mismo desasosiego que la noche anterior, pero mucho más exagerado, hasta tal punto que casi empezaba a ponerme nervioso. Siempre dentro de mi sangre fría y mi calma habitual, pero sin conseguir quitarme esa mala sensación de encima, así que me fuí al ordenador, a revisar el correo, mientras hacía tiempo, no quería salir de casa, debía esperar una llamada que no sabía exactamente sobre que hora sería. Tal había sido mi insistencia la noche anterior, que acordamos que me llamarían dos veces, a mitad de camino, y cuando hubieran llegado para ir a buscarle.

Alrededor de las 11 recibí la primera de las dos llamadas que esperaba. Sin poder hablar con él, me tranquilizó bastante, no era más que una muesta que todo iba bien. Seguía con mis malas vibraciones, pero estaba mucho más tranquilo, con lo que me fuí a comprar El Pais, y me dispuse a leer tranquilamente. Llegó la hora de comer, y ver las noticias, todo hay que decirlo, me tranquilizó mucho no oir nada de ningún accidente grave, y ya casi era la hora esperada, y para hacer tiempo, seguí con el ordenador, ya casi era la hora! Estaba deseando tanto ese momento...

Recibí una segunda llamada, convencido de que sería la que esperaba. Pero no, si que tenía que ver, pero no... Era una llamada de un hospital, que tenía que ir. No me podían decir nada, pero debía ir cuanto antes. Por más que pregunté, no me dijeron nada concreto, sólo cosas muy vagas y generales, que me intranquilizaron por completo, ahora si que ya no podía más. Primer problema, a quien llamar, como ir? Quien me podría llevar a hacer cerca de 200 Kms? En poco rato ya lo conseguí, y así me puse en camino, muy intranquilo, y tras varios años de haberlo dejado, volví a fumar para calmarme un poco por el camino.

Cuando llegué, supe toda la verdad. Intencionadamente para evitar males mayores, me enteré de lo que había pasado directamente, un mazazo horrible, y que tras estos años, no he podido ni pienso olvidar. No me vine abajo, suelo crecerme ante las situaciones más difíciles, y gracias a esto he podido volver a disfrutar de la vida, aunque nada pueda ser igual desde entonces. Relacionado con el tema, y con mis sentimientos, he dejado en mi sección Canción de la semana una de mis canciones más especiales, y que me renueva el optimismo incluso en estas situaciones y fechas en las que lo normal sería estar abatido, prefiero guardar los buenos recuerdos y lo bueno vivido juntos.